Titulo: ¿Por qué no jugamos?
A lo largo de mi vida he tenido muchos móviles pero el que más me gusta de todos los que tengo ahora.
Siempre recuerdo el primero de mis móviles, yo tendría alrededor de 13 años y era el típico móvil Nokia que se abría y tenía una antena que se sacaba como si por sacarla fuéramos a tener más cobertura, pero yo la sacaba porque molaba y siempre tenía la posibilidad de hacer el tonto con ella molestando a la gente.
El siguiente móvil que tuve fue la evolución del anterior y la antena ya no se sacaba, como las organizaciones escolares siempre buscando cosas nuevas, ese fue el móvil que más me ha durado porque tengo una pequeña maldición con los móviles ya que me suelen durar muy poco ya sea por una u otra razón, pero ese móvil molaba un montón, hasta que quemé en una hoguera lo que tenía por antena, yo no sé qué pasaría con mi antena… a lo mejor se la quedaron unos escarabajos. Siempre solíamos poner algo como bandera cuando apagamos esa hoguera, pero en esa ocasión no estaba porque ya habíamos hecho la tontería de quemar las antenas de nuestros móviles y no estábamos de muy buen humor. Siempre quemábamos cosas raras que encontrábamos por la calle, una vez quemamos un colchón y una vez en la puerta de un establecimiento de todo a 1€ encontramos una caja con muchas escobas, antes de quemarlas jugamos con ellas al hockey y pegábamos escobazos a una lata de cerveza. La competición la ganó el más grande porque nos iba amenazando con las escobas y eso no molaba nada…
TAZA
Soy una taza que vive en un bar en Madrid, justo al lado de una oficina muy céntrica en Madrid. Esto de vivir aquí es un stress, al menos estoy rodeada de todas mis hermanas. Esta toda mi familia también por aquí, pero desgraciadamente eso es lo único bueno.
Siempre me echan café que está muy muy caliente y no me gusta mucho, y ya para que vamos a hablar de las señoras que vienen y me rechupetean dejando la marca de sus pintalabios sobre mí, como si yo no fuera suficientemente guapa ya, como para que tengan que mancharme con sus cosas…
Luego otro problema es cuando después de que me utilicen me meten en el lavavajillas es una locura ese sitio te echan agua a diferentes temperaturas te agitan te golpean y muchas de mis amigas se han quedado ahí de todos los golpes que las han dado, encima luego viene el señor que nos tiene en su bar y las recoge con mucho desprecio e insultándonos “maldita taza, ya se ha roto…”
Y todo este sufrimiento para qué? Para volver a ser utilizada por señoras llenas de pintalabios que nos rechupetean o por un señor lleno de barba que se dedica a pincharnos con sus afilados pelos de tres días.
Para colmo siempre está el camarero nuevo que se dedica a tirarnos al suelo, a mi me da mucho miedo que me lleven los nuevos porque siempre tiran algo y nos rompen, encima que nos tira exclaman otra vez “¡¡¡maldita taza!!!”, como si tuviéramos nosotros la culpa de que nos rompamos porque nos tiran y nos traten mal.
:D
ResponderEliminarTe lo anoto.